El Cabildo Insular de Tenerife prueba ya un nuevo sistema con CO2 que busca acabar con ella por ahogamiento. «Las trampas de feromonas no acaban con la plaga de la polilla». Así de contundente se expresaba Carlos Tabares, experto en métodos para la extinción de estos lepidópteros y asesor de la empresa Fluidos Canarios S. L. Desde la década de los años noventa llevan ya en las Islas Canarias luchando contra esta plaga, que llegó a Asturias este verano desde Galicia. Y ninguno de sus métodos -entre ellos, las trampas con feromonas que se están usando en el Principado- ha funcionado. A tenor de esa experiencia en Canarias, Tabares incide en que las feromonas «no son eficaces para extinguir a este animal invasor». El Cabildo Insular de Tenerife, de hecho, ya está probando nuevos métodos para tratar de acabar con este insecto. Aunque mantiene las trampas con feromonas, también está recurriendo ahora al CO2, un sistema que acaba con las polillas por ahogamiento. Link